El partido entre River Plate y Racing Club por la Copa Argentina sigue generando repercusiones. En el centro de la polémica se encuentra el árbitro del encuentro, Hernán Mastrángelo, quien fue objeto de fuertes críticas y acusaciones de parcialidad antes, durante y después del partido disputado en el Gigante de Arroyito.
La Previa Caliente: Acusaciones de Fanatismo
Desde el momento en que se anunció la designación de Mastrángelo para dirigir el crucial encuentro, las redes sociales y algunos medios se inundaron de publicaciones que lo vinculaban con River Plate. Se rescataron viejas fotos, declaraciones de familiares y recortes de noticias con el objetivo de presionar y condicionar su desempeño. Una declaración de su hermana, Romina Mastrángelo, donde afirmaba que "en casa todos somos gallinas", fue particularmente utilizada para alimentar las suspicacias.
El Partido y las Polémicas
El encuentro en sí no estuvo exento de controversias. Una de las jugadas más discutidas fue una falta de Adrián Martínez sobre Juan Carlos Portillo, donde Mastrángelo solo mostró tarjeta amarilla cuando muchos consideraban que ameritaba la expulsión. La ausencia de VAR en esta instancia del torneo añadió más leña al fuego de la polémica.
La Respuesta de Mastrángelo
Dos días después del partido, Mastrángelo rompió el silencio y utilizó su cuenta de Instagram para responder a las acusaciones. "Después de tantas pavadas, solo queda responder con honestidad y profesionalismo", escribió el árbitro, acompañando el mensaje con fotos del equipo arbitral. Su publicación fue interpretada como una defensa ante las presiones y una afirmación de su integridad profesional.
¿Suficiente para Calmar las Aguas?
Si bien el mensaje de Mastrángelo busca desmarcarse de las acusaciones, la polémica en torno a su arbitraje en el River-Racing persiste. La presión sobre los árbitros en el fútbol argentino es una constante, y este caso particular pone de manifiesto la intensidad con la que se vive cada partido y la dificultad de impartir justicia en un contexto tan cargado de emociones y suspicacias.
El informe de Mastrángelo sobre el incidente de Balboa, quien escupió a Acuña, también añade un capítulo más a la controversia, demostrando que las tensiones dentro del campo de juego se trasladaron a los informes oficiales.