Claudio Giráldez, entrenador del Celta de Vigo y con pasado en el Atlético de Madrid, se enfrenta a un desafío considerable: vencer al equipo de Diego Pablo Simeone. El partido, que se disputará mañana, será la cuarta vez que Giráldez se mida al conjunto colchonero, un rival que, según sus propias palabras, es "el más en forma del fútbol europeo".
Para este crucial encuentro, Giráldez recupera al carrilero Sergio Carreira, quien ha recibido el alta médica. Sin embargo, ha decidido descartar por decisión técnica a Yoel Lago. El Celta llega a este partido tras una importante victoria en la Europa League contra el PAOK, un triunfo que, según el entrenador, ha reforzado la identidad y la confianza del equipo.
El Celta busca mantener su identidad
Giráldez destacó la importancia de mantener la personalidad y el buen juego que han caracterizado al Celta, incluso en los momentos difíciles. "Tuvimos la personalidad que solemos tener, muchos momentos de buen fútbol y aprovechamos cada posesión para minar al rival. Apretamos bien y estuvimos ordenados", afirmó el entrenador, subrayando la necesidad de recurrir siempre a las señas de identidad del equipo.
La competencia interna: un factor clave
El entrenador también abordó la situación de Damián, un jugador que ha tenido pocas oportunidades pero que ha sabido aprovecharlas. Giráldez reconoció que ha sido injusto no solo con Damián, sino con otros jugadores, pero explicó que la competencia interna es fundamental y que cada jugador debe ganarse su lugar en el equipo. "La forma de trabajar en el día a día hace que tengas la oportunidad y que cuando la tengas la agarres", sentenció.
El partido contra el Atlético de Madrid se presenta como una prueba de fuego para el Celta de Giráldez. ¿Podrá el equipo gallego superar al "rival más en forma" y sumar una victoria importante en Balaídos?