EE.UU. al borde del abismo: Despidos masivos amenazan si no hay acuerdo
La Casa Blanca ha lanzado una advertencia contundente: si no se llega a un acuerdo presupuestario en el Congreso antes de fin de mes, miles de empleados federales se enfrentarán a despidos masivos. La disputa se centra en la negativa demócrata a respaldar la propuesta republicana de financiamiento provisional hasta finales de noviembre.
Según un memorando interno de la Oficina de Gestión y Presupuesto, la administración Trump está considerando medidas drásticas que van más allá de las licencias temporales utilizadas en cierres anteriores. El documento insta a las agencias a considerar el envío de avisos de Reducción Laboral (RIF) a todos los empleados.
La Cámara de Representantes ya aprobó la extensión del gasto, pero en el Senado, donde los republicanos tienen una estrecha mayoría, se necesita el apoyo de al menos siete demócratas para aprobarla. El tiempo apremia: al finalizar septiembre, el gobierno se quedará sin fondos para pagar a los trabajadores considerados no esenciales.
El término "reducción laboral" (RIF) evoca la ola de despidos implementada meses atrás bajo el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), impulsado por Elon Musk durante la administración Trump. Esta medida se asemeja a los recortes de gasto público y eliminación de puestos federales iniciados por Musk al comienzo del mandato de Trump.
El presidente Trump ha responsabilizado directamente a la oposición: "Todo esto es causado por los demócratas. Nos pidieron hacer algo que es totalmente irrazonable", declaró durante una reunión con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
La situación actual plantea serias dudas sobre la estabilidad del gobierno y el futuro de miles de empleados públicos. Un cierre parcial del gobierno podría dejar sin fondos a numerosas agencias federales, impactando servicios esenciales y la economía nacional.
El país se enfrenta a un posible cierre de gobierno el próximo 1 de octubre si no se llega a un acuerdo presupuestario entre republicanos y demócratas. La Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca ya ha informado a las agencias que, en caso de cierre, se cesará a los empleados de programas que no estén legalmente obligados a continuar.
La administración republicana busca eliminar permanentemente los puestos de trabajo que no encajen en las prioridades del presidente Trump, intensificando una política de recortes que ha caracterizado su gestión.